Shanghái. Los internautas chinos viven estos días enganchados a una aplicación, Zao, que cambia la cara de personas famosas por la del usuario por el módico precio de poder utilizar su rostro y datos, un intercambio que ha generado tal polémica que la compañía tuvo que salir por estas horas a pedir perdón.

"Hemos estado reflexionando y revisando (nuestro producto) estos últimos dos días por no poder abordar los problemas que son de interés público. ZAO no almacenará información personal de reconocimiento biológico facial", apuntaron este martes los creadores de la aplicación a través de la red social Weibo (el Twitter chino).

Y es que ayer, lunes, la prensa oficial china alertaba sobre la preocupación de los usuarios de que su imagen pudiera ser utilizada de un modo delictivo con los avances del reconocimiento facial, ya que al darse de alta se autoriza a la compañía a utilizar las imágenes.

Con esta aplicación, lanzada hace una semana, el usuario puede insertar su foto en escenas de famosas películas, series de televisión, videoclips... de modo que parecen ellos mismos quienes están actuando.

En respuesta a las preocupaciones de algunos usuarios de que individuos pudieran hacer mal uso de la aplicación para acceder a sus cuentas de pago en línea escaneando sus rostros, ZAO enfatizó que usar la aplicación no incurrirá en ningún riesgo.

"El intercambio de caras presentado en el vídeo no es su información verdadera. Aunque a simple vista parezca similar, no recopilamos ninguna información biológica personal", explicó la compañía.

En su anuncio, ZAO dijo además que si los usuarios eliminan información o cancelan sus cuentas, la aplicación eliminará información relevante según las normas y reglamentos pertinentes.

 

EFE