Como ocurrió las últimas dos veces que se enfrentaron Boca y Rosario Central, los canallas apelaron a un juego intenso, de presión, como si fuera una final y logró derrotar una vez más al xeneize. Un rendimiento colectivo que gustó aunque no se floreó.

Jeremías Ledesma: Arriesgó demasiado en el juego aéreo en cada pelota detenida. Algo inseguro, dudó cómo resolver en situaciones que parecían sencillas. De todos modos, aunque con un toque de fortuna, consiguió su segunda valla invicta consecutiva.

Paulo Ferrari: Correcto marcando por su banda. Boca no inquietó por su sector. Más preocupado por defender que por atacar, casi no se proyectó. No cometió ninguna de las 19 faltas del equipo

Fernando Tobio: Siempre más preocupado por sacar la pelota lejos antes que prestarle atención a la forma. Bien de arriba, alguna vez lo costó de abajo. Como en Córdoba, lo volvieron a amonestar por salir a cortar lejos, y mal. Igual cumplió. 

Mauricio Martínez: Perfecto en los cierres. Fue uno de los puntos altos de la última línea. Más allá de alguna imperfección a la hora de despejar, se sigue consolidando como defensor antes que como volante.

José Luis Fernández: Ni Pavón, ni Junior Benítez, ni Espinoza, lo llegaron a complicaron por su sector. En el final, le faltó ayuda de los volantes. Pasó poco al ataque y no cometió infracciones. Llevaba más de 7 mese sin jugar como titular, no se notó.

Washington Camacho: Muy desordenado. Mejoró en el complemento, cuando pasó a jugar más suelto. Rossi le sacó un cabezazo de gol. Salió promediando el segundo tiempo.

Maxi González: Mucho sacrificio, corrió a todos en el medio. Cometió 4 faltas, pero al menos zafó de la amonestación. Y si bien le costó imponerse en la batalla, cumplió una aceptable tarea.

Leonardo Gil: Se ganó tontamente una amarilla en el arranque. Se esforzó para colaborar en la recuperación, aunque se lo vio incómodo. Lo reemplazaron en el entretiempo.

Federico Carrizo: En la primera pelota parada que ejecutó, llegó el gol de Ruben. Rossi le sacó dos remates claros de gol. Con la pelota en los pies, y como viene sucediendo en partidos anteriores, fue el más desequilibrante.

Marco Ruben: Olfato goleador pleno para convertir en la única que tuvo. Con su gol, el Canalla logró un triunfo importantísimo. Y, de yapa, marcó por primera vez ante Boca, el único grande que le faltaba quebrar.

Fernando Zampedri: Recibió poco juego limpio. En los pelotazos largos, complicó cada vez que pudo. Pero aportó mucho más en la lucha que en ofensiva. Se hizo amonestar para llegar a la quinta y asegurar su presencia en el Clásico.

INGRESARON LUEGO

Maximiliano Lovera: Como en partidos anteriores, abusó demasiado de la individual. Y ganó pocas veces en sus intentos.

Joaquín Pereyra: Entró para manejar la pelota en el medio, y lo consiguió varas veces. Esta vez, más allá de sus 18 años, la responsabilidad no le pesó.

Agustín Maziero: Le tocó debutar en primera jugando un puñado de minutos. Corrió y obligó, hizo lo que le pidieron.

DIRECTOR TÉCNICO

Leonardo Fernández: Al orden defensivo que había mostrado en el partido anterior, le agregó intensidad para recuperar. Mostró capacidad para presionar en los sectores apropiados, eligiendo los momentos. No supo cómo cerrar el partido, y aunque fue justo vencedor, lo terminó sufriendo. Al equipo le sigue faltando juego. Pero busca suplirlo con sacrificio y voluntad, forzando errores del rival. Por ahora, le alcanza con eso.

ÁRBITRO

Patricio Loustau: Perdió autoridad a partir de los airados reclamos que le realizó varias veces Pablo Pérez, capitán de Boca. Los protagonistas le discutieron la mayoría de sus fallos, aunque no tuvieran razón. Expulsó bien a Goltz, pero lo hizo a instancias del cuarto árbitro,