Leonardo Ponce murió este lunes por la noche, en la puerta de su casa, en Nuevo Alberdi. Un llamado telefónico lo hizo salir a la vereda, donde lo esperaba su verdugo con un arma cargada. Lo ejecutó con varios balazos, según escuchó la esposa de la víctima.

Primero habría trascendido que el crimen fue el corolario de una discusión originada en un asado entre amigos. Hasta que el Ministerio Público Fiscal brindó la información surgida de la investigación que abrió la fiscal de Homicidios, Marisol Fabbro. Eran las 9 y media de la noche cuando sonó un llamado en el teléfono celular de Ponce, de 34 años. Su mujer lo vio atender y salir de la casa, y un instante después ella escuchó varios balazos ahí afuera.

Al asomarse, la mujer vio a su marido exánime, con algunas vainas servidas de calibre 9 milímetro y 45 cerca del cuerpo. La fiscal ordenó peritajes sobre el teléfono de la víctima, y sobre su vehículo que estaba estacionado frente a la casa.

Los sicarios, en tanto, están prófugos. 

El asesinato fue el séptimo que ocurrió en el departamento Rosario, en la primera semana del año.