Una familia pasó en un instante de una mañana rutinaria a un infierno inesperado cuando dos hombres armados se apoderaron del vehículo en el que había quedado la mujer y su hijo de diez años, y se los llevaron secuestrados hasta un rato después, cuando los liberaron en un asentamiento precario de barrio Acindar.

Ocurrió esta mañana de jueves, en Biedma y Crespo. Allí se detuvo Claudio a comprar facturas en una panadería de Biedma al 3300. Dentro del Fiat Idea de color gris plata quedaron su esposa y el hijo de ambos. Pero de pronto, dos delincuentes aprovecharon que el hombre había entrado al comercio y abrieron la puerta a punta de revólver. Se subieron al vehículo y partieron con rumbo desconocido, y con madre e hijo sometidos y presas del pánico. Esa misma situación se apoderó de Claudio, al salir a la vereda y comprobar lo que acababa de ocurrir.

Los delincuentes liberaron a sus rehenes en Iriondo y Cagancha, y escaparon con el auto robado. La mujer y su hijo estaban a salvo, pero en evidente crisis nerviosa cuando la policía y el jefe de familia los encontraron.

Investiga la Policía de Investigaciones.