Maximiliano Pullaro se defendió públicamente de las acusaciones que comenzaron a girar a su alrededor luego de que trascendiera una serie de escuchas telefónicas que lo involucran directamente. El ministro de Seguridad dijo que la intervención a una línea telefónica perteneciente al gobierno provincial es "ilegal" y apuntó contra quien haya ordenado ese procedimiento. Visiblemente molesto, dijo que "se trata de una operación política o de sectores oscuros que pretenden golpear a la política".

El funcionario brindó una conferencia de prensa en la capital provincial. Pullaro se apuró en recalcar que "no tenemos nada que esconder" para luego aclarar que sus dichos en las escuchas "bajo ningún concepto configuran delito". Más tarde el ministro calificó a la decisión de "pinchar" su línea como un hecho de "una gravedad inusitada". 

Pero más allá de defenderse, el ex diputado radical disparó con dureza contra Apullán, el fiscal que investigaba al comisario  Rodríguez y que luego fuera apartado de varias causas trascendentales que involucran a funcionarios e importantes personalidades vinculadas a la seguridad. "Podemos evaluar dos o tres versiones: la primera es que se trató de una escucha ilegal", remarcó. "Esto fue grave, no vamos a parar", agregó. 

Entonces Pullaro contó que en la mañana de este martes presentó una denuncia "penal y administrativa" en el Ministerio Público de la Acusación "para que se investigue". El ministro entiende que en el pedido de intervención de la línea puede existir un delito: "Queremos ver bien cuales fueron los fundamentos". 

Para el funcionario provincial, en las escuchas difundidas el lunes queda claro que "no tengo nada para ocultar, bajo ningún punto de vista". En tanto que, hipotetizó, quienes se encuentran detrás de las mismas "quieren evitar la reforma policial que se lleva adelante en Santa Fe".