La candidata presidencial del Frente Nacional, Marine Le Pen, fue atacada a huevazos este jueves, durante una visita a una fábrica en Dol-de-Bretagne, en la Bretaña francesa, en el oeste del país, en la misma jornada en la que su padre, el ex líder del FN Jean Marie Le Pen, consideró que "le faltó altura" durante el debate presidencial que en el que enfrentó el miércoles a la noche al liberal Emmanuel Macron.

Le Pen fue recibida con insultos y huevazos, que no la alcanzaron gracias a la protección de su equipo de seguridad, durante su visita a una fábrica en Dol-de-Bretagne, situado en una región en la que recibió pocos votos durante la primera vuelta electoral.

Luego de conseguir el segundo lugar en las elecciones del 23 de abril, y quedar habilitada para competir con el liberal Emmanuel Macron, Le Pen relanzó su campaña y acrecentó sus gestos hacia los trabajadores con visitas a conflictos obreros y fábricas en distintos puntos de la geografía gala. Anoche, a tres días del balotaje presidencial, la candidata del Frente Nacional se enfrentó con Macron en un debate televisivo de alto voltaje en el que los postulantes lanzaron acusaciones cruzadas.
Al respecto, el padre de la candidata derechista y fundador del partido, consideró que a su hija Marine "le faltó altura" durante el debate.

Le Pen aseguró que el cruce entre los postulantes fue "aburrido" en su primera parte e "incomprensible" para la mayoría de los telespectadores, circunstancia que a su entender, "benefició a Macron" más que a su hija.

"Creo que su entorno le aconsejó que actuara así, con la esperanza de que se hundiera o se derrumbara psicológicamente un hombre que no parece muy sólido", analizó Le Pen, que meses atrás cortó toda relación con su hija a raíz de las disputas internas en el Frente Nacional.

Sin embargo, volvió a mostrarse confiado en una victoria de su partido en la segunda vuelta que se disputará el próximo domingo, aunque ningún sondeo la augura, y aseguró que el debate de anoche acabó en empate, informó la agencia de noticias EFE.

Hace 15 años, el fundador del FN accedió a un balotaje con el conservador saliente Jacques Chirac, ocasión en la que este último se negó a debatir con el líder de la ultraderecha.

Aunque Jean-Marie Le Pen ha asegurado que votará por Marine, las relaciones entre ambos son inexistentes desde hace varios años, cuando la candidata trató, sin éxito, de expulsar a su padre de la presidencia de honor del partido.

El motivo son las insistentes declaraciones del histórico líder en las que relativiza los alcances del holocausto, que le han costado varias condenas judiciales y de las que la formación política buscó desligarse. En una entrevista que ayer publicó el semanario Paris Match, Marine Le Pen consideró "groseras" las recientes declaraciones de su padre sobre el homenaje rendido al policía asesinado el pasado día 20 en los Campos Elíseos de París, quien había considerado que la posición oficial fue "más un homenaje a un homosexual que a un policía".