Un tribunal turco ordenó un peritaje para determinar si el presidente el país, Recep Tayyip Erdogan, tiene parecido físico a Gollum, un particular personaje de la saga de películas de El Señor de los Anillos. Es que los jueces deben definir si decirle “Gollum” al mandatario supone un delito de insulto.

El caso es bastante extraño. El juzgado debe decidir si el médico Bilgin Çiftçi ha cometido un delito de "insulto al presidente" al compartir en las redes sociales un fotomontaje que compara las expresiones faciales de Erdogan con las de Gollum, una figura central de la novela de J. R. R. Tolkien llevada con gran éxito al cine.

No es una pavada, aunque suene a chiste. La acusación pide dos años de cárcel por un delito de insultos, pero la defensa ha subrayado que Gollum no es un personaje malvado, por lo que no se puede determinar una intención delictiva.

Tanto el juez como el fiscal de Aydin, la ciudad en el oeste de Turquía donde se desarrolla el juicio, admitieron que no habían visto los famosos films, por lo que el tribunal decidió encargar un peritaje, que deberá ser elaborado por un equipo de dos académicos, dos psicólogos y un experto en cine. Sí, mucha gente para ver dos fotos y definir si tienen similitudes, ¿no?

"Primero queríamos considerar el caso bajo el prisma de la libertad de expresión, subrayando que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo ha confirmado el derecho a realizar caricaturas, incluso ofensivas, de políticos, pero los jueces no nos hicieron caso", explicó al medio Cumhuriyet el abogado de la defensa.

"Así, el juicio se ha convertido en una tragicomedia. Nuestra defensa también es cómica. Han empezado a juzgar a Gollum, y en las próximas sesiones no defenderé a mi cliente, sino que defenderé a Gollum", concluyó el letrado, Hicran Danisman.

En espera del peritaje sobre el carácter ambiguo del personaje de Tolkien el juicio se ha aplazado al próximo febrero. Ya incluso antes de que haya sentencia, el acusado ha sido relegado de su puesto de funcionario como medida disciplinaria ordenada por el Alto Consejo de Salud Pública.