El empresario supermercadista Alfredo Coto negó las circunstancias que concluyeron con la muerte de un anciano, a manos de guardias de la sucursal de su cadena que posee en el barrio porteño de San Telmo, y también le restó importancia al arsenal de armas y municiones que se le encontró el año pasado en otra sucursal de esa ciudad, y por la que está procesado. 

Coto brindó estas declaraciones a los periodistas Alejandro Bercowitz y Jairo Stracchia, durante el desarrollo este miércoles del encuentro de la Asociación Empresaria Argentina. Al ser preguntado sobre la muerte violenta de Vicente Ferrer, de 69 años y con demencia senil, a instancias de dos vigiladores que lo retuvieron por intentar llevarse sin pagar un queso, un aceite y un chocolate de aquel supermercado, Coto respondió: "Todos los errores que pudimos cometer con 19.000 empleados... sinceramente ni se lo que pasó, no creo que haya sido así. Cuando una persona le pasa algo nos tenemos que poner mal todos. Hay muchas versiones. Nadie mató a nadie. Averigüen lo que pasó", dijo.

Y ante la pregunta de si puede repetirse una situación similar en alguna de sus bocas de expendio, el empresario respondió: "No se lo que puede pasar". No voy a hablar de eso, ya está, todo lo que tienen que hacer el showbusiness. Acá no hubo errores".

En otro tramo del mini reportaje realizado en el hotel Sheraton de Buenos Aires, Coto se escandalizó cuando le consultaron sobre el arsenal de armas y pertrechos militares y policiales hallados el año pasado en la sucursal que la cadena de supermercados tiene en el barrio porteño de Caballito. "¿Un arsenal? Si tenés empresa de seguridad y tenés escopetas bien registradas ante el Renar, que las usa el personal de seguridad, es parte de lo que pasó en el país. Pero si son muy jóvenes y no saben lo que pasó en 2001... Entonces vendrán y le diremos acá estamos", desafió.