Rolando Sinforoso Rosas, el intendente de la localidad de Soconusco, México, tuvo una idea para evitar que los ciudadanos se contagien de covid-19. A las medidas ya conocidas de higiene personal, cuarentena y distanciamiento social, le agrego una que hasta ahora no se le había ocurrido a nadie: prohibió morirse de coronavirus

“Por decreto municipal, queda estrictamente prohibido morirse por coronavirus en este municipio”, es el mensaje que se lee en una letrero colocado en la plaza central de Soconusco. Y no es una forma graciosa de hablar de la pandemia, lo dice bien en serio: "Por supuesto que está prohibido morirse, porque nos han informado que esta es la semana crítica para la expansión del virus», explicó en una entrevista para la tv.

Y aunque muchos se han reido por la absurda consigna del letrero, crease o no, parece estar funcionando: hasta la fecha Soconusco no registró ni un solo caso positivo por covid-19, en tanto en la localidad colindante de Acayucan se han detectado tres casos.

Obviamente el intendente no espera que un cartel haga magia, y desde el inicio de la crisis se instaló a la entrada de la ciudad un filtro sanitario donde se les toma la temperatura, se les brinda gel antibacterial y a los conductores del transporte público se les entrega mascarillas. Absurdos pero no tanto.