Un equipo de científicos de Austria, Finlandia y Hungría “escanearon” árboles para comprobar si se producían ciclos diurnos y nocturnos como tienen los animales o las plantas pequeñas.

El experimento se llevaron a cabo en Finlandia y Austria, en la misma época del año y en condiciones similares: en noche tranquilas y cerca del equinoccio solar para garantizar una duración similar de la noche.

«Nuestros resultados muestran que todo el árbol cae durante la noche, lo que puede verse como un cambio de posición en las hojas y ramas», dijo Eetu Puttonen del Instituto de Investigación Geoespacial de Finlandia en un comunicado. «Los cambios no son demasiado grandes, solo hasta 10 cm para árboles con una altura de aproximadamente 5 metros, pero fueron sistemáticos y estaban dentro de la precisión de nuestros instrumentos».

Los científicos creen que este cambio se debe a una disminución de la presión de agua interna del árbol y creen que  esta forma de relajar sus ramas es una forma de descansar para guardar energía. Luego de estos resultados, los expertos aplicarán la misma técnica de observación en otras especies forestales para comprobar si de igual manera descansan a la noche.