Tal vez por su nombre parezca una broma o simplemente una ley absurda, pero la "ley anti-chancla" fue aprobada en la ciudad de Jalisco y es una reforma al Código Penal para cuidar a niños y niñas mexicanas.

Se trata de una nueva ley que le prohíbe a los padres o tutores castigar físicamente a los más chicos y a partir de ahora el uso de este tipo de castigos también podrán ser denunciados y ser penados con hasta cinco años de prisión.

Cabe destacar que antes de este cambio, un artículo del código penal no consideraba maltrato infantil al ejercicio de "corregir" a los niños mediante la violencia física o psicológica.