La organización humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) presenta por primera vez en Rosario la instalación “Seguir con Vida”, una innovadora acción participativa con gafas de realidad virtual que se podrá recorrer en la Plaza Montenegro, en la explanada del Centro Cultural Roberto Fontanarrosa (San Martín 1080), y que busca acercar a los rosarinos a las realidades que viven las personas que se encuentran atrapadas en conflictos armados o que se ven forzadas a escapar de sus hogares para sobrevivir.

La instalación, que podrá visitarse del lunes 10 al viernes 14 de septiembre, incluye tecnología de realidad virtual (gafas y videos en 360°) para que los participantes puedan sumergirse en la vida diaria en un campo de refugiados en Bangladesh, ver con sus propios ojos la realidad de las personas desplazadas que huyen de la violencia en Sudán del Sur, o experimentar un rescate a bordo de uno de los barcos en los que MSF trabaja en el Mar Mediterráneo.

“Ponerse en el lugar de quienes tienen que dejar todo y abandonar sus hogares, o quedan atrapados en un campo de refugiados, es una manera de acercarnos a esas realidades que a veces parecen tan distantes desde nuestro lugar”, explica Carolina Heidenhain, directora de comunicación de MSF. “Con esta nueva acción, queremos permitirle a los rosarinos conocer los rostros y las experiencias de quienes buscan sobrevivir a los conflictos y mostrar también la enorme capacidad del ser humano para ayudar a aquellas personas cuya vida está amenazada”.

Seguir Con Vida se instala alrededor de un container especialmente diseñado e intervenido por la artista Adry Balbo, donde los participantes podrán conocer más acerca de los desafíos que atraviesan algunas de las personas a las que MSF presta atención médica y asistencia humanitaria en 462 proyectos en 72 países alrededor del mundo.

Quienes se acerquen podrán experimentar mediante gafas de realidad virtual en primera persona y por unos minutos cómo es ponerse en la piel de aquellas personas que intentan huir de la violencia, la persecución y la pobreza, lanzándose al mar o sobreviviendo en un campo de refugiados.