El Barcelona volvió a entrenar por segundo día consecutivo sin Lionel Messi, quien se mantiene en rebeldía tras comunicar al club su intención de marcharse, mientras todas las miradas están puestas en la inminente llegada del padre y representante del futbolista, Jorge Messi, con vistas a la reunión que mantendrá con la directiva azulgrana para negociar su futuro.

La máxima expectativa mediática estaba depositada en el posible aterrizaje de Jorge Messi en el aeropuerto El Prat, procedente de Rosario. Será crucial la "cumbre" con el presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu, para encaminar una solución que permita a Messi cumplir con su voluntad de abandonar el club de toda su vida.

Desde que Messi comunicó por burofax su intención de abandonar el Barcelona adhiriéndose a la cláusula que le permitiría salir gratis, hace exactamente una semana, Jorge Messi y Bartomeu mantuvieron contactos telefónicos en los que defendieron sus posiciones encontradas, a la espera de una reunión cara a cara con la esperanza de un acercamiento.

Por el momento, los puntos de vista no han cambiado y mientras el club considera que Messi tiene contrato en vigor hasta junio de 2021 y debería estar ya ejercitándose bajo la disciplina de Koeman, el máximo goleador de la historia del Barcelona ya ha dado por finalizada su relación de 20 años con la entidad catalana.

La directiva del Barcelona insiste en que si Messi quiere irse debe pagar la cláusula de rescisión de su contrato de 700 millones de euros, al tiempo que pretende ofrecerle una renovación hasta el mundial de Qatar de 2022.

Por su parte, los abogados del futbolista dejaron claro que Messi quiere irse y que ya expresó su voluntad al finalizar la temporada, como en los plazos marcados por el contrato para hacerlo con una carta de libertad, pese a que lo hizo el martes de la semana pasada y no el 10 de junio, debido a que la competición se extendió a raíz de la crisis del coronavirus.

Todo apunta a que su decisión es marcharse al Manchester City de Pep Guardiola, aunque cada vez son más las informaciones que apuntan a que su traspaso es muy complejo. Si bien el argentino confía en conseguir el transfer de la FIFA y, en última instancia, parece dispuesto a exponerse a batallar en los tribunales contra el Barcelona, la operación económica requiere mucho músculo financiero y, además, en el caso del City, el club inglés debe tener cuidado con el Fair Play financiero de la UEFA.

El diario catalán Mundo Deportivo enfrió la posibilidad de que Messi termine junto a Guardiola y su amigo Sergio "Kün" Agüero, al afirmar, en línea con la prensa inglesa, que el City no ve posible el fichaje a no ser que el jugador llegue gratis.