En pocas semanas Leo Fernández consiguió lo que Paolo Montero no pudo en todo el semestre. Quien llegó a la Primera División de Rosario Central silbando bajito y luego de hacer un buen trabajo en las divisiones inferiores sacó chapa tras ganar dos juegos en fila y avisó que si finalizado el interinato no es confirmado en el cargo buscará “otros horizontes”.

"Somos un cuerpo técnico del club, todos hinchas de Central. Estamos muy felices por este presente. Nosotros llegamos en una situación comprometida del equipo y los jugadores estaban anímicamente muy mal, muy golpeados", le dijo el DT al programa Jogo Bonito. Y luego dejó en claro cuál es la postura de su grupo de trabajo.   

"Si no nos quedamos en Primera, nos vamos. Hemos hecho todas las divisiones inferiores y uno va cumpliendo etapas. Como toda persona quiere progresar, quiere crecer y me parece que es un punto muy alto", sentenció Fernández consultado acerca de su futuro.

Leo explicó que aunque dirigir en Primera no estaba entre sus objetivos inmediatos, “se aceleraron los tiempos, nos hicimos cargo y nos está yendo bien".

El golpe ante Boca

El actual entrenador Canalla celebró especialmente el triunfo ante el puntero del campeonato. "La expulsión de Goltz simplificó. Hoy jugar con un hombre menos es dar mucha ventaja", opinó.

Fernández entendió que su equipo tuvo “situaciones para estirar la ventaja, no pudimos y luego sufrimos”. El DT destacó especialmente “el funcionamiento del equipo en todo momento, tratando de ahogar a Boca”.