El seleccionado argentino de fútbol, liderado por su estrella rosarina Lionel Messi, arribó y se instaló el sábado a la noche en la ciudad de Bronnitsy, a 60 kilómetros de Moscú, sitio elegido para la concentración a la espera de su debut en el Mundial de Rusia, el próximo sábado ante Islandia por la primera fecha del Grupo D.

El vuelo charter que transportó a la delegación nacional desde Barcelona, España, aterrizó en Moscú poco después de las 16 (hora argentina) y desde allí se trasladó a la concentración en el ómnibus oficial, que usará a lo largo de la competencia y que se distingue por la leyenda “Unidos por una Pasión”.

El lugar elegido como “búnker” argentino es un centro de entrenamiento especialmente acondicionado por la AFA y en el que, previamente, se preparaban equipos nacionales de remo, esgrima y otras disciplinas deportivas.

Algunos hinchas argentinos recibieron al equipo en el aeropuerto moscovita y otros se mezclaron con vecinos de Bronnitsy para saludar a la delegación a su paso, escoltada por patrulleros, y en el ingreso a la concentración.

El primer entrenamiento en suelo ruso es este domingo por la tarde, en el que el DT, Jorge Sampaoli, completará el plantel con el arribo del volante de River Plate Enzo Pérez (citado de urgencia tras la lesión de Manuel Lanzini) y empezará a definir la formación para el choque con Islandia.

Hasta aquí, el equipo que se perfila es el siguiente: Wilfredo Caballero; Gabriel Mercado, Nicolás Otamendi, Marcos Rojo y Nicolás Tagliafico; Javier Mascherano y Giovani Lo Celso; Maximiliano Meza, Lionel Messi y Angel Di María; y Sergio Agúero. También tienen chances de titularidad Federico Fazio (por Rojo), Lucas Biglia (por Mascherano) y Christian Pavón (por Meza).

A partir del lunes las prácticas serán parcialmente abiertas a la prensa, los jugadores darán conferencias diarias y el jueves -dos días antes del debut por exigencias de la FIFA- el plantel se trasladará a Moscú.