El delantero alemán de origen ghanés Kevin-Prince Boateng se convirtió este lunes en la nueva incorporación del Barcelona, equipo del rosarino Lionel Messi y líder de la Liga española de fútbol, según confirmó la prensa española.

El jugador nacido en Alemania, pero que representó a la selección de Ghana, supo ser considerado un jugador top hace tiempo atrás, tras desempeñarse en el Tottenham, Milan y disputar los mundiales del 2010 y del 2014.

Sin embargo, Boateng nunca logró asentarse en un club y además su carrera estuvo rodeada de escándalos en varias ocasiones, lo que hizo que perdiera valor en el mercado y consideración en el ambiente futbolístico. Por poner un ejemplo, en el año 2014 (cuando jugaba en el Schalke 04) asistió a un control anti-doping con un cigarrillo y una cerveza. 

 

La llegada del ex Milan se dio debido a que el Barcelona necesitaba un delantero suplente para sustituir a Messi y a Luis Suárez, ya que no hay jugadores en las inferiores del club que terminen de convencer al entrenador, Ernesto Valverde.

Asimismo, Boateng sabe que no contará con muchas oportunidades de lucirse siendo sustituto de dos de los mejores atacantes del mundo, aunque una chance como esta no se presenta muy a menudo. 

Cabe señalar que en su último club, el Sassuolo de Italia, el futbolista convirtió 6 goles en 15 partidos. Se trata de una cifra que lo deja lejos de los goleadores top de Europa pero que no está nada mal teniendo en cuenta que sufrió algunas lesiones que no le permitieron jugar con regularidad.