Las horas de Maradona en Rosario son especiales y también lo fue su llegada al Coloso Marcelo Bielsa. Minutos antes de las seis de la tarde el DT de Gimnasia llegó al Parque Independencia en medio de un fuerte operativo de custodia y con una tranquilidad que impresionó.

Diego salió del hotel de Mitre y Catamarca con un habano en su boca y su ya conocida gorra de Venezuela. Así subió al colectivo y así llegó al estadio. En el trayecto, autos particulares y de la Policía lo escoltaron con máxima atención.

Apenas pisó el Coloso, Diego recibió el cariño de los leprosos y, claro, otra vez Maradona les devolvió un gesto de cariño. Luego se perdió en la zona de vestuarios para ya poner la cabeza en el partido.