Pretemporada corta. Un juego intenso y agresivo. Una de estas razones, o todas juntas, complican el horizonte cercano de Rosario Central, que sufre de ausencias y sigue sumando bajas por lesiones musculares. A las lesiones de Washington Camacho y Néstor Ortigoza (que no estuvieron el miércoles en Avellaneda), ahora el Canalla debe agregarle dos más, que pueden ser tres.

Es que este viernes, el DT Leo Fernández confirmó que para el partido del lunes ante Gimnasia y Esgrima en el Bosque platense descartó las presencias de Marco Ruben y Mauricio Martínez. El capitán canalla y el polivalente joven proveniente de Unión sufrieron distensiones musculares y no llegan al lunes.

En tanto, a esa lista podría sumarse Fernando Tobio, quien padece una fuerte contractura y será esperado "hasta último momento" por el cuerpo técnico auriazul.

Sucede que de ser descartado Tobio, el Canalla deberá improvisar una nueva zaga central. Allí empiezan a tallar los nombres del pibe Luciano Recalde y del colombiano Oscar Cabezas, flamante incoporación. Uno de estos dos podría acompañar a Tobio, en caso de que el ex Boca esté disponible. Pero si no, ambos podrían conformar la zaga.

Hay algo más: por Cabezas el Canalla aún no recibió el tránsfer de Patriotas de Boyacá, por lo que el defensor cafetero todavía no está habilitado. Si el papel se demora, Fernández no podrá contar con él. Y allí surge otro intringulis: si ni Tobio ni Cabezas son de la partida, el DT canalla deberá correr a Alfonso Parot al medio y se sumaría el pibe Andrés Lioi, que dejó una buena imagen ante Independiente el miércoles.

Con todo, el problema más sencillo de resolver para Fernández es el reemplazo de Marco Ruben. El goleador canalla arrastra problemas físicos y se quedó afuera del partido ante el Lobo. Allí, el DT auriazul tiene a mano a Germán Herrera, efectivo y cumplidor cuando le toca entrar.