El tenista suizo, Roger Federer, quien terminó la temporada en el tercer puesto del escalafón internacional, concluyó su vínculo con el que fue su entrenador en estos dos últimos años, el sueco Stefan Edberg, ex número uno del mundo, y en su lugar contrató al croata Ivan Ljubicic.

Edberg había sido una figura clave en la renovación del juego de Federer en este último tiempo, reconstruyó su tenis con dosis de agresividad y confianza. Ambos habían conformado una exitosa dupla de trabajo. Roger pasó del octavo lugar en el ranking de la ATP al segundo puesto en 2014 para concluir tercero en 2015, con 34 años, siendo capaz de haber ganado en ese periodo once títulos.

Si bien la decisión de no seguir adelante por cuestiones personales había sido tomada y anunciada desde hace tiempo por el sueco; Roger esperaba que su entrenador lo acompañara, al menos, un año más.

Después de haber insistido para que siguieran juntos, sin lograr respuesta favorable, Federer, convocó al retirado, Ivan Ljubicic, de 36 años, quien fuera uno de los sacadores más potentes del circuito y que hasta hace poco había estado trabajando con el canadiense Milos Raonic.