Un colectivo de la nueva línea Q que iba por calle Mendoza se enredó con un cable salido de un poste de luz, a poco de cruzar Corrientes, y terminó derribando la columna. Por suerte, no hubo heridos ni vehículos dañados por la caída del poste, pero el tránsito en ese lugar clave del centro rosarino estuvo cortado cerca de una hora. Y hubo que organizar un operativo de agentes de Tránsito y otros de Alumbrado Público para normalizar la situación de los cables en el lugar.

El tránsito de los viernes, habitualmente caótico, fue un poco más complicado en el área central rosarina. A los vehículos que llegaban por Mendoza se los desviaba por calle Corrientes. Esto generó un cuello de botella en el que participaron colectivos, autos, motos, taxis e inclusive otras dos unidades de las líneas K y Q que debieron también desviarse. Desde la Secretaría de Control confirmaron que el tránsito volvió luego a la normalidad ya que "la columna fue puesta sobre la acera".

El cuidacoches Ezequiel Díaz, que trabaja en la zona, contó a Rosarioplus.com que poco antes de las 14.30 “la Q se llevó puesto el cable salido de la columna, y como la columna estaba oxidada se terminó cayendo hacia la calle”.

En tanto que un agente de tránsito que estaba en el área confirmó a este medio que se trató de un cable de la luz que estaba suelto hacia la calle: “No se sabe cómo se soltó pero fue por eso que la Q se enganchó y arrastró con toda su fuerza al poste”, detalló.

Eran muchos los que caminaban por el lugar en horas del mediodía. “De milagro no cayó el poste de luz sobre una persona”, sostuvo con alivio un hombre que pasaba por la calle, a la vez que protestó porque había dejado su camioneta estacionada junto a la iglesia Santa Rosa de Lima para hacer un trabajo y al regresar se encontró el operativo, por lo que tuvo que esperar para poder sacarla.