La directora de la escuela Nº124 de Villa Gobernador Gálvez, María Teresa Vecchia, publicó en su red social Facebook un fotomontaje simulando el secuestro por parte del genocida Jorge Rafael Videla en un Falcón verde, auto emblemático de la última dictadura, de Alberto Fernández, Cristina Fernández de Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof. Abajo de la imagen escribía: "Lo que deseamos todos los argentinos de bien". 

La publicación generó el repudio inmediato de propios y ajenos, por lo que se apuró a eliminar el mensaje de su perfil pero ya era tarde. El contenido de apología al terrorismo de Estado ya había llegado a las autoridades del Ministerio de Educación de la provincia que tomó cartas en el asunto y sumarió a la directora. Fue la misma ministra Adriana Cantero, quien ordenó en la jornada de lunes, el inicio de la investigación sumarial que determinará la sanción correspondiente.

“Difundir la imagen de un Falcon verde con funcionarios del gobierno actual en su baúl y la foto del dictador al frente, representa un nivel de odio, incitación a la violencia y promoción de la ideología fascista que nuestra sociedad no puede permitir”, denunció el Encuentro de Derechos Humanos que agrupa a todos los organismos de la provincia, entre ellos el Foro contra la Impunidad de Santa Fe y el Espacio Juicio y Castigo de Rosario.

“Es muy triste que una docente reivindique a la dictadura o crea que las diferencias políticas se dirimen secuestrando personas”, dijo la secretaria de Derechos Humanos de la provincia, Lucila Puyol. “Eso es lo que hacían las patotas que operaban en los Falcon. Videla representa el secuestro, la persecución, la tortura, el asesinato y la desaparición de personas. Es lo que no queremos ‘Nunca más’ en la Argentina”, agregó.

La agrupación Nuevo Encuentro de Villa Gobernador Gálvez fue la primera que reaccionó ante la conducta de Vecchia, que interpretó como “una provocación intolerable”. Y pidió al Ministerio de Educación que la sancione con “la energía que corresponde a la defensa de la democracia y los derechos humanos. Nadie, con esos principios y valores, puede participar en la educación de nuestros hijos”. La respuesta de parte de la provincia no se hizo esperar y en el día lunes, primer día hábil tras el episodio viral, se le notificaba a la directora que había entrado en sumario.