La provincia, desde el Laboratorio Industrial Farmacéutico Sociedad del Estado (LIF), avanza en un proyecto de fabricación pública de misoprostol, uno de los medicamentos que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera esencial para la práctica de un aborto seguro. El desarrollo lleva varios años y ahora se incluye como una de las políticas del Estado del proyecto de ley para la despenalización del aborto presentado por la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

En diálogo con Rosarioplus.com Orlando Llanos, al frente de la Dirección Provincial de Políticas de Géneros e Interculturalidad en Salud, contó los detalles de un proyecto que ya tiene varios años de investigación y desarrollos. 

"Esta es una posibilidad que se baraja desde hace muchos años y desde el 2014 se vienen realizando algunos avances parciales en este sentido. Pero fue este el año en que se lograron algunos aspectos técnicos que ponen la producción desde la provincia de la droga como un horizonte cada vez más cercano y posible", explicó el funcionario. 

En relación a cuáles son esos aspectos técnicos detalló que "se trata del manejo de insumos para la producción en escala, el modo de distribución que se plantearía en primera instancia y otras cuestiones referentes a la logística". 

En cuanto a la presentación del medicamento especificó que "se trata de comprimidos de unos 200 microgramos de misoprostol, exclusivamente diseñado para la interrupción del embarazo y la facilitación de otros procesos en el cuerpo de la mujer". El medicamento que se utiliza en la actualidad, el Cytotec, es un antiulceroso prescripto para úlceras duodenales y lesiones gastrointestinales.

"Estamos pensando en un medicamento óptimo y para usarse en casos específicos, como ser la inducción del parto en caso de muerte uterina -disminuyendo notablemente las intervenciones quirúrgicas que se realizan hoy en día-, la dilatación del cuello del útero en casos prescriptos, entre otros", agregó. 

Pero el desarrollo trae, además. aparejada otra disminución para el LIF y es la de costos. Hoy en día el laboratorio de la provincia compra la droga a un privado y con ello abastece distintas dependencias públicas. El desarrollo propio de la misma abaratará costos y abre otras perspectivas de comercialización incluso para el ente público, como ya lo hace con otros productos como los sueros, que vende a otras provincias y clínicas privadas, incluso. 

"En principio la droga se desarrolla para suministro en hospitales y dependencias de salud pública. Luego veremos cómo se arbitrará, si es que así se hace, la venta a privados y el acceso a la misma a través de otras obras sociales", detalló el director. 

"Este desarrollo se enmarca en una salud pública de calidad que garantice los derechos de las mujeres". Hoy en día el misoprostol cuesta unos 3 mil pesos, con este desarrollo en hospitales públicos se suministrará de manera gratuita.