Fue un aniversario distinto, atravesado por la pandemia. Se cumplieron siete años desde la explosión de la torre de Salta 2141, que le costó la vida a 22 personas y por la cual hubo un solo condenado –el gasista que intervino– y todos los demás –10 imputados, entre técnicos y jerárquicos de Litoral Gas, y de la administración del edificio– resultaron absueltos en el juicio que culminó hace un año. 

El acto se desarrolló frente al solar que hoy está donde antes estaba el inmueble de la catástrofe. Hubo las expresiones previsibles de dolor renovado por deudos que claman por una justicia que no les satisfizo. En el clamor también está el reproche a las autoridades provinciales que pasaron y a las actuales, porque siguen esperando que se cumpla la creación de un "espacio cultural y educativo de la memoria y la música", tal como se prometió.

"Solo pusieron el portón e hicieron el estudio de suelo. Parece que la pandemia paró y justificó todo. Esta todo quieto, es una foto. A (Miguel) Lifschitz le agradecemos la intención política de la expropiación, pero prometió que iba a inaugurar por lo menos la planta baja del edificio antes de que termine su gobierno y no cumplió", dijo Marcela Nissoria, una de las impulsoras de la gesta que mantiene la memoria sobre la peor tragedia colectiva que vivió la ciudad. Y agregó: "La sociedad es la que más nos ha entendido y acompañado estos años. Acá nadie tiene que contarle a los rosarinos qué fue lo que pasó en calle Salta 2141. Es algo que nos tocó a todos y por eso la insistencia del Memorial, porque los gobiernos que no tienen memoria repiten la historia". 

También hubo el desfile de autoridades con sus condolencias de rigor que, no obstante, no cubren la expectativa de las 22 familias en luto perpetuo. Solo la titular del Concejo, María Eugenia Schmuck, aportó una promesa de gestionar una reunión de los deudos con el gobernador Omar Perotti para volver a poner en agenda la construcción del espacio cultural en Salta 2141.