La ministra de Seguridad Patricia Bullrich aseguró que el gobierno "no va a permitir" el corte de puentes y que no descarta la intervención de las fuerzas federales de seguridad que ya están apostadas en los principales accesos a la Capital Federal. Y la decisión no atañe solamente a Buenos Aires y su conurbano. También en Rosario se desplegaron agentes de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval con la orden de mantener despejado el tránsito en la avenida Circunvalación, que corresponde a la ruta nacional A-008, de jurisdicción federal.

Por lo tanto, la orden de la ministra aquí se tradujo en la presencia de los efectivos que obligaron a los manifestantes de la Corriente Clasista y Combativa y otras organizaciones populares a realizar sus piquetes de protesta, pero debajo de la avenida Circunvalación.

En tanto, Bullrich celebró su decisión y afirmó por radio que "está todo liberado", en referencia a los principales accesos de Buenos Aires, entre los que mencionó la zona de la ruta Panamericana y ruta 197, autopistas y puentes. No hizo mención de lo que ocurre en Rosario.

"Está todo liberado, la gente puede venir a trabajar, están garantizados los accesos por las fuerzas federales de seguridad", dijo la titular de la cartera de Seguridad de La Nación.  En simultáneo, un retén de Prefectura reprimía con gases lacrimógenos y balas de goma un piquete  en el Puente Pueyrredón.

Dejó en claro Bullrich que "no se va a permitir" que se corten esos accesos e indicó que se han reportado algunos incidentes en supermercados y estaciones de servicios donde grupos de delegados gremiales impedían el ingreso del personal.

Al respecto dijo que "la Gendarmería y la Policía Federal, según corresponda, va a garantizar que quien quiera trabajar lo haga, y agregó: "No se van a permitir aprietes".

En otro tramo de la entrevista, Bullrich dijo que estaban "hartos de los paros" y recordó que se trataba del quinto paro que le hacían al gobierno de Mauricio Macri.

"Estamos hartos de los paros, de que cada dos por tres hagan un paro. Es el quinto paro. Cuando hay un gobierno que no es del partido de los sindicalistas, pasa esto", sostuvo.

Dijo que "Cambiemos piensa distinto" y lamentó que haya gente "que tiene que adherir por la fuerza" al paro "para no sufrir aprietes".

Finalmente, consideró "muy poco democráticos estos paros con piquetes" y dijo que se va a garantizar desde su cartera el acceso a través de "todas las arterias que dependen del gobierno nacional, como el Puente Pueyrredón" y que "no se descarta la intervención de las fuerzas federales".