El fiscal Florentino Malaponte pidió el sobreseimiento del hombre de 34 años que en octubre del año pasado mató a puñaladas a su esposa y a su hija de 2 años en su vivienda de barrio Acindar, ya que actuó así tras haber sufrido un brote psicótico según las pericias médicas. La causa pasó a un cuarto intermedio.

El fiscal pidió su sobreseimiento en la causa que se le sigue en la Justicia penal, según explicaron fuentes tribunalicias, porque según el informe de la junta médica “no puede ser imputado por no comprender la materialidad de los hechos que cometió ni el examen médico al que fue sometido”.

A pesar de que no tiene dudas de que Iván Furiasse fue el autor material de los homicidios, Malaponte solicitó “que el proceso continúe en la Justicia civil, para que se determine su grado de incapacidad”, basado en el resultado de los estudios forenses, que dictaminaron que no tiene capacidad para comprender el hecho que cometió ni está en condiciones de afrontar un proceso penal.

Los estudios arrojaron que el asesino sufre una “desorganización del pensamiento y alucinaciones”, con riesgo de volverse crónicas, y "existe la posibilidad de que manifieste tendencias suicidas y éste cuadro es difícil o imposible de simular”, por lo que recomendaron que sea internado.

El pedido de Malaponte es que se determine el grado de incapacidad que Furiasse padece y sea internado en un establecimiento psiquiátrico donde no ponga en riesgo su integridad física ni la de terceros.

El defensor público que representa a Furiasse no planteó ninguna objeción y Malaponte hizo saber que la familia de las víctimas estaba al tanto de todo el proceso.

Pese a ésto, el juez penal Núñez Cartelle resolvió pasar a un cuarto intermedio antes de resolver, por considerar que “dada la complejidad del caso resultaría apresurado resolver sin adentrarse ni interiorizarse en la lectura de los informes, para entender acabadamente la patología que Furiasse padece”.

Furiasse habría sufrido un brote psicótico aquel trágico 24 de octubre de 2017, en que mató a su esposa y a su hija. En enero del año pasado ya había sido internado durante dos meses por un episodio similar.