Luego de que se conociera la noticia de que unas 200 personas se intoxicaran en una cena de graduados de quinto año el sábado pasado en el salón de fiestas Estación del Norte, las hipótesis acerca de qué pudo haberlo provocado empiezan a salir a la luz. Un dato que no es menor es que parte de los empleados del catering que trabajaron ese día estaban saliendo de una gastroenteritis, lo que pudo haber influido en la contaminación de alimentos.

Al menos así lo contó a Rosarioplus.com un ex empleado que trabajó durante la noche de la intoxicación de los graduados de quinto año del Colegio Nuestra Señora de la Asunción: una semana antes del episodio, un encargado había ido a trabajar con un cuadro de vómitos, diarrea, fiebre y malestar corporal. Esto ocasionó que sus compañeros, en su mayoría del área de producción alimenticia, se contagiaran.

“No estábamos en condiciones de ir a trabajar, aunque fuimos igual. A los que faltaron no les pagaron el día. Iban cayendo de a poco, uno por uno”, relató a esta persona que pidió que su nombre no se publique por temor a sufrir algún tipo de represalia.

El día en que se produjo la intoxicación masiva ellos trabajaron y algunos aún padecían esos trastornos, lo que pudo haber influido en la contaminación de la comida al ser manipulada, según especuló. Pero ni desde Abasto catering ni desde la productora de eventos Dreamers, tomaron cartas en el asunto en los días previos. “Ellos (dueños) no tomaron una medida como empresa para contrarrestar la situación, por ejemplo, llamar a un médico o hacer un estudio a todos”, reprochó.

Por otro lado, el trabajador gastronómico dijo que la semana pasada fue una empresa privada de exámenes bromatológicos y del Instituto Municipal del Alimento y “no le remarcaron nada”. “Hablaban de recetas de cocina, sabiendo que había personas que estaban enfermas”, lamentó. Desde el Instituto del Alimento dijeron que el salón de fiestas de avenida Alberdi al 400 no presentaba anomalías al ser inspeccionado

El ex empleado del catering no descartó, además, que la contaminación de la comida se haya producido por una falla en la cadena de frío de los alimentos. Según su versión: “Había irregularidades, errores en la cadena de frío. Y había poca gente en la parte de producción entonces se trabajaba más apretados y puede surgir algún error. Igual, siempre se le echa la culpa al peón pero había muchos encargados”.

Rosarioplus.com intentó comunicarse con la empresa, para conocer su versión de los hechos, pero hasta el momento de publicada esta nota los responsables no devolvieron el llamado.