La difusión de fotografías halladas en el teléfono celular de un imputado como partícipe necesario del crimen del pastor Eduardo Trasante provocó un cruce entre los fiscales del caso y la querella particular, que llamó “canalla” y “basura” a los fiscales de la causa por no haber brindado la información hasta la imputación el pasado jueves.

Como parte de las evidencias presentadas en la audiencia por el homicidio, en la que un procesado por narcotráfico y dos jóvenes fueron imputados, los fiscales Matías Edery y Gastón Ávila exhibieron cinco fotografías obtenidas del celular de uno de los acusados, Alejo Leiva.

Dos de esas fotos son de carteles escritos a mano sobre papel que dicen “por violador” y “nunca más vas a violar a una mujer”, y las tres restantes del frente de la vivienda de Trasante, donde fue asesinado de un balazo en la cabeza el 14 de julio pasado.

Leiva fue imputado el jueves junto a Facundo Sebastián López y Julio Rodríguez Granthon –un piloto de nacionalidad peruana ligado al narcotráfico- como partícipe del asesinato de Trasante, por sus vinculaciones con la logística previa y posterior al homicidio y la adquisición del automóvil que se usó en el hecho.

La difusión de las fotografías enojó a la querella, cuya abogada Gabriela Durruty dijo que “la investigación dio un giro cuando la fiscalía dio a conocer a los medios, antes que a la propia querella, que representamos a la viuda de Eduardo, unos carteles que ni siquiera fueron valorados como elemento de prueba ni mucho menos como potencial móvil del crimen”.

Durante la audiencia, Durruty consideró como “una canallada” la incorporación de las fotografías, al entender que no aportan a la evidencia contra las personas involucradas.

“Es inverosímil que esos carteles ventilados puedan siquiera acercarse al móvil del crimen”, abundó la abogada querellante.

El referente el partido local Ciudad Futura por el que Trasante fue concejal, Juan Monteverde, apuntó que “además de fiscales corruptos, Rosario tiene fiscales basura capaz de prestarse a cualquier operación inmunda del poder político sin importarle que haya familias destruidas atrás”

El fiscal Edery dijo que la investigación tiene “varias hipótesis” y por su función tiene “la obligación de investigar” todas.

La querella se molestó porque Trasante dejó su banca de concejal en diciembre de 2019 tras un caso de acoso sexual que no fue judicializado, y las fotografías difundidas alientan la idea de un móvil sexual.

El fiscal dijo que pedirá al partido Ciudad Futura que informe sobre aquel suceso que terminó con la renuncia de Trasante.

“Verificamos que no existe denuncia penal de este conflicto. Vamos a solicitar informes a Ciudad Futura para que nos ilustre sobre el tema y evaluar si corresponde citar a alguien”, sostuvo Edery en declaraciones a Radio Dos de Rosario.

Además, dijo que “los carteles son evidencia objetiva, fotos que estaban en un teléfono de una persona que participó en la logística”.

“Puede ser un motivo, puede ser para desviar la investigación, pero estamos obligados a investigar” concluyó el fiscal.

Además de los tres imputados el jueves, por el asesinato de Trasante –que perdió a uno de sus hijos en el Triple Crimen de Rosario- habían sido imputados con prisión preventiva otras dos personas, todas vinculadas a la compra y “descarte” del Peugeot 308 blanco que usaron los ejecutores el día del homicidio.