En otro “intento de callarnos”, como lo describieron las edilas María Eugenia Schmuck y Fernanda Gigliani, un grupo de taxistas envió una nota a la Presidencia del Concejo para que se apliquen sanciones disciplinarias a las dos legisladores que habían denunciado un accionar mafioso en las paradas de la Terminal Mariano Moreno. El jueves se había aprobado un pedido de informes sobre la supuesta Cooperativa que opera en Santa Fe y Cafferata.

“Piden al presidente del Concejo que se nos interpele por las manifestaciones que hemos realizado, así como que se tomen contra nosotras medidas disciplinarias”, explicó Schmuck sobre la nota que el viernes ingresó al Palacio Vasallo. Sorprendida por lo ocurrido, agregó que se trata de “una vulgar intimidación que confirma todo lo que veníamos diciendo”.

Por su parte, Fernanda Gigliani aseguró que se trata de un hecho “muy serio y preocupante”. La concejala criticó que quienes debieran garantizar el control en las paradas “o son burlados, o son insuficientes o existe connivencia”.

“Lo que llama la atención, o no, es que un día después de aprobar en el Recinto un pedido de informe sobre los orígenes de esta supuesta cooperativa, y de reunirnos con el Fiscal Regional Patricio Serjal para evaluar conjuntamente el avance de la causa judicial, ingrese esta nota, un claro intento de silenciarnos”, enfatizó Schmuck.

Las concejalas, que se pusieron al frente de la disputa en el cuerpo legislativo local, aclararon que no claudicarán en su lucha. “No esperen de nosotras otra actitud más que la de seguir generando acciones para garantizar que en la Terminal de Ómnibus se cumpla la ley y se terminen los privilegios”, finalizaron.

El mes pasado se puso la lupa sobre un grupo de taxistas supuestamente organizados en Cooperativa. Las concejalas denunciaron un accionar mafioso y afirmaron que apenas un puñado de trabajadores tienen el control de las paradas en la Terminal, cuando éstas deberían ser libres.