El procedimiento preventivo de crisis al que logró acceder la cadena francesa de supermercados Carrefour en el país, que incluye un acuerdo con el sindicato de Empleados de Comercio para la apertura de 150 retiros voluntarios, no cayó bien entre los supermercadistas rosarinos, que le piden al Gobierno nacional "condiciones igualitarias". Por eso, la Cámara de Supermercadistas de Rosario y la Región (Casar) emitió un comunicado que denuncia "competencia desleal" y pide "la misma respuesta y atención".

"Queremos las mismas condiciones para todos los supermercados, sobretodo aquellos que son de capitales extranjeros que han tenido grandes regalías en 30 años", le dijo Juan Manuel López Raidó, vocero de Casar, a Ariel Bulsicco en Sí 98.9. El representante del supermercadismo advirtió que desde su radicación en Argentina en la década del '90, Carrefour obtuvo "ganancias extraordinarias que se envían a la casa matriz en Francia".

Según López Raidó, "hoy nuevamente nos encontramos en desventaja" en relación con Carrefour. "Venimos con una caída sostenida de 16 meses del consumo y tenemos un alza de los servicios muy alta, por ejemplo hay supermercados que tuvieron un mil por ciento de aumento tarifas de luz", graficó y concluyó: "La problemática es para todo el sector, por eso queremos mínimamente que el trato sea igualitario, ni más ni menos".

Duro comunicado

Casar emitió un comunicado en el que critica con dureza el proceso preventivo de crisis al que accedió Carrefour, empresa a la que acusa de ser "generadora de cuantiosos cierres de pymes argentinas dedicadas a la venta de consumo masivo, al desembarcar en nuestro país con sus grandes tiendas, llevándose las utilidades y realizando dumping con sus productos".

Según Casar, "el financiamiento a esta empresa avalado por la entidad sindical, significa un financiamiento y quita en los aportes patronales, esto genera una competencia desleal respecto de las otras empresas del sector, fundamentalmente las Pymes nacionales que invierten, generan empleo, viven, gastan y consumen en nuestro país y nuestra región, empresas con menos espalda, pero muchísima más capacidad de lucha, por lo que esperamos del Estado y de la entidad sindical la misma respuesta y atención en función de las necesidades que nos encontramos atravesando".