La textil Sedamil, donde se confeccionó el hilo de poliéster para la camiseta que la selección argentina utilizará en Rusia 2018, cerró su planta en la ciudad chubutense de Trelew. La firma dijo “basta” luego de mantener suspendidos durante once meses a sus 107 trabajadores, con quienes ahora negocia retiros voluntarios.

"Fue muy difícil hacer frente a los trabajadores para semejante noticia que nos transmitieron los empresarios”, dijo el secretario adjunto de la Asociación Obrera Textil (AOT), Sergio Cárdenas, en declaraciones que recogió el diario Crónica.

Cárdenas además dijo no estar sorprendido por la situación, ya que fue casi un año de agonía el que atravesaron los trabajadores. “Todos sabemos que es imposible tener una planta sin producir y con los obreros cobrando”, lamentó.

El ministro de Producción de Chubut, Pablo Mamet, consideró que “lo ocurrido es parte de la falta de respuesta sobre la competitividad que venimos reclamando desde la provincia”.

Ahora la empresa busca que los trabajadores firmen un retiro voluntario con “algún beneficio extra”, según contaron los afectados. Entre los despedidos hay empleados de hasta 29 y 30 años de antigüedad. También alrededor de 15 jóvenes que habían ingresado hace 1, 2 o 3 años a trabajar.