La respuesta que el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, dio tras el escándalo de la filtración de datos de usuarios de la red social a Cambridge Analytica, fue considerada insuficiente por el ministro británico de Cultura, Matt Hancock.

"Vi anoche que Mark Zuckerberg se disculpó y dijo que harán algunos cambios, pero sinceramente no creo que estos cambios vayan suficientemente lejos", señaló el ministro luego de que después de días de silencio, el empresario pidiera disculpas y se mostrara dispuesto a declarar ante el Congreso de Estados Unidos por la filtración a la consultora británica vinculada a la campaña electoral del presidente Donald Trump.

El martes pasado, el Comité de Asuntos Digitales, Cultura, Medios de comunicación y Deportes de la Cámara de los Comunes citó a Zuckerberg para explicar esta filtración.
Además del Parlamento británico, también la Cámara de Representantes estadounidense y la Eurocámara solicitaron que comparezca para que aclare el escándalo.

Hancock dijo que las empresas de tecnología tendrán que ser más transparentes sobre la forma en que usan datos personales de los usuarios. "De todos modos, no deberían ser las compañías las que decidan cuál es el equilibro entre privacidad e innovación y el uso de datos", comentó.

Zuckerberg admitió a la cadena CNN que este caso supone una "gran violación de la confianza" y reconoció que la empresa tiene la "responsabilidad de proteger los datos de las personas".

El escándalo se profundizó con la decisión del consejo de dirección de Cambridge Analytica de suspender esta semana a su consejero delegado, Alexander Nix, mientras se lleva a cabo una investigación independiente para analizar el escándalo.

El Canal 4 de la televisión británica divulgó en los últimos días imágenes tomadas con una cámara oculta en las que se podía escuchar a Nix sugerir tácticas que la consultora utiliza para desacreditar a políticos a través de la red.