Elif Bilgin, una joven científica de 16 años de la ciudad de Estambul, en Turquía, investigó sobre el plástico y generó una alternativa a este producto que utiliza petróleo y que tarda de 100 a mil años en degradarse. Su invento fue destacado por el Premio Ciencia en Acción de Scientific American y el Premio del Votante de la Feria de Ciencia Google 2013.

"Mi objetivo fue desarrollar un método para el uso de cáscaras de plátano en la producción de bio-plástico como un reemplazo para el plástico a base de petróleo tradicional. La razón por la que elegí este aspecto particular de la ciencia es que el bioplástico es un nuevo concepto y su campo de aplicación se ha ampliado desde su descubrimiento (sobre todo en el siglo XXI)”, explica la joven en su sitio web.

Este nuevo plástico está formado a partir de cáscaras de banana y además de ser biodegradable, es más económico y emite entre 0,8 y 3,2 toneladas menos de dióxido de carbono que el convencional, siendo igual de resistente y versátil.

Elif explica que el procedimiento de realización comienza remojando la cáscara en metilbisulfato de sodio, antes de hervirla y molerla. Luego, la pasta se transfiere a una cápsula y se cocina.