Google, Twitter, Facebook y otras empresas californianas de Internet, crearon un grupo de lobbistas para manifestar ante la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos (FCC) su oposición a la norma que planea aplicar el organismo sobre la neutralidad en la red, que flexibilizaría el control sobre las telecomunicaciones que ofrecen conectividad.

El presidente de la FCC, el republicano Ajit Pai, que aún no presentó públicamente su plan, establecería que proveedores de Internet (también llamadas ISP) como AT&T, Comcast, Carta y Verizon "podrían escapar a la regulación dura, y sólo tendrían que prometer por escrito que no van a bloquear las páginas web o reducir la velocidad del tráfico de los competidores", según informó el diario The Wall Street Journal.

Aunque pretende mantener en principio los fundamentos de la neutralidad de la red, Pai le otorgará la supervisión del cumplimiento de la normativa a la Comisión Federal de Comercio, medida a la que se opone la Asociación de Internet (Internet Association), el grupo de lobbistas que representa a varias compañías del Silicon Valley californiano, ya que cree que “la neutralidad de la red debería seguir siendo vigilada por la agencia experta en el tema, informó el sitio especializado Genbeta”.

Para el grupo de lobbistas, la regulación de neutralidad de la red debería restringir el uso y la venta de líneas de alta velocidad, asegurar que no existen cuotas de interconexión no razonables, eliminar cualquier distinción entre la fibra y las redes inalámbricas y que la FCC sea la encargada de asegurar que se aplican las normas.

"La industria de Internet sigue pensando que la neutralidad de la red preserva la experiencia del usuario, la competitividad y la innovación", señaló la Asociación en un documento, en el que pidió que "las normas aplicadas sobre neutralidad de la red deberían quedar intactas".

La neutralidad en la red es un principio que hace referencia a cómo debe ser el tratamiento del tráfico y los paquetes de datos que circulan a través de Internet, e implica que los ISP garanticen que sus clientes puedan descargar, enviar, recibir o acceder a cualquier contenido o sitio sin ningún tipo de restricción.