La construcción del sistema base a la red de satélites de tercera generación de Beidou terminó, lo que permite ofrecer a partir de esta semana servicios precisos de posicionamiento, navegación y horario a nivel mundial, indicó en una rueda de prensa el director de la Oficina de Navegación por Satélite de China, Ran Chengqi.

"Esto marca la entrada de Beidou en una 'era global' después de su 'era regional'", agregó Ran. El sistema estaba en marcha en China y en partes de la región de Asia-Pacífico desde diciembre de 2012. En esa zona cuenta con un margen de precisión de cinco metros, mientras que a nivel mundial esta cifra se eleva a diez metros.

Actualmente, China cuenta con 33 satélites Beidou en funcionamiento: 18 de la tercera generación y 15, de la segunda. Los planes de Pekín pasan por lanzar otros once satélites de tercera generación y uno más de segunda generación.

China comenzó a construir su propio sistema de navegación por satélite en 2000 para acabar con su dependencia del sistema GPS, y decidió bautizarlo como Beidou, nombre que los astrónomos chinos de la Antigüedad otorgaron a las siete estrellas más brillantes de la Osa Mayor, la parte popularmente conocida como "El Carro".

Beidou es uno de los cuatro proyectos espaciales de redes de navegación, junto al citado GPS y a Galileo, de la Unión Europea, y GLONASS, de Rusia.

 

(EFE)