El mundo de las criptomonedas -como el bitcoin- será uno de los focos a los que apuntarán los ciberdelincuentes en 2018, anticipó un extenso informe que advirtió además sobre la sofisticación del malware en dispositivos móviles y el robo de datos en transacciones comerciales.

Este panorama de amenazas para el próximo año se completa con un aumento en los ataques a routers caseros (que no suelen contar con mantenimiento de seguridad), reveló esta semana una investigación de la empresa rusa de seguridad informática Kaspersky. 

Pero las redes sociales no se quedarán afuera de este escenario debido a la proliferación de grandes redes de bots (sistemas automatizados que emulan el comportamiento humano) que si bien no conforman un software malicioso en sí, prosperan en esas plataformas para generar campañas de desinformación (como la de la supuesta influencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016).

Frente a la pregunta: "¿Qué podemos esperar en 2018?", Kaspersky respondió que las monedas criptográficas serán "un objetivo atractivo para los ciberdelincuentes".
Son varias las rutas en este caso, una de ellas los ataques de ransomware, un tipo de software malicioso que encripta los archivos de las computadoras o teléfonos afectados y exige a las víctimas rescates en bitcoins para "liberar" los equipos. 

En concreto, la investigación advierte sobre los "mineros infiltrados", ciertos tipos de malware que se instalan en sitios web y aprovechan los recursos informáticos de los internautas -sin que estos lo sepan- para minar criptomonedas, y así generar dinero de forma gratuita.

En línea con el tema, Camilo Gutiérrez Amaya, jefe del Laboratorio de investigación de la empresa de ciberseguridad ESET, dijo que "América Latina no se queda fuera de este foco", y agregó que es "muy posible que en 2018 sigan creciendo las infecciones de máquinas de usuarios con amenazas del tipo Miner (mineros infiltrados), sobre todo de aquellas criptomonedas que aún tienen menor complejidad en el minado".