Como hace siete años, la fábrica de autopartes Paraná Metal, en Villa Constitución, vuelve a transitar una crisis por una caída de producción. El síntoma del mal momento fue el envío de unos 180 telegramas de preaviso de despido ante un posible cierre de la planta villense.

El dato fue confirmado desde la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), de Villa Constitución. La conducción de la metalúrgica en la que se emplean 210 trabajadores señaló que el 31 de octubre próximo pararía la actividad de manera definitiva, ante la falta de demanda que la llevó a producir por debajo del mínimo de costos.

En una reunión que delegados de la UOM sostuvieron el miércoles con directivos de la firma perteneciente al Grupo Indalo (Cristóbal López), se configuró “un escenario muy complicado que si no mejora en cuanto a carga de planta” podría llevar al cierre de la planta. El propietario pretende mantener un piso garantizado al mes de 1000 toneladas de producción.

Hasta entonces, aseguran, Paraná Metal funciona a pérdida, a razón de 4 millones de pesos al mes.

Desde la UOM, no obstante, reprochan a la patronal que no tienen voluntad de reforzar la viabilidad de la fábrica.

Paraná Metal fue uno de los puntales de la economía de Villa Constitución, y llegó a ser uno de los principales proveedores de Ford Argentina y Ford Brasil. En 2008 estuvo a un tris de cerrar hasta que en 2009 el gobierno nacional instaló a Cristóbal López como inversor y evitó el cierre. Hoy el amesetamiento de la economía y la pérdida de competitividad vuelve a poner a la autopartista contra las cuerdas.

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