Este jueves es el día en que Luis Alberto Spinetta cumpliría 70 años, y habrá alta celebración con el lanzamiento de un disco inédito, para todos los amantes de su melodía y poética, bajo la feliz premisa que lleva el nombre "Ya no mires atrás". En esta nota, todos los condimentos sobre cada canción.

El disco lo grabó entre 2008 y 2009 en su estudio La Diosa Salvaje, y le faltaban la mezcla final y la masterización, tarea que todos sus hijos se pusieron al hombro en ocasión de celebrarlo con sus fans. Se podrá encontrar en todas las plataformas digitales y en formato físico.

“Esperamos que a papá le guste como quedó”, dijo su hija, quien reveló el origen del disco: “Lo encontramos en un pen drive, grabado íntegramente, sólo faltaban la mezcla final y la masterización”. El disco se pondrá a la venta primero en CD y en febrero estará también en vinilo, formato que incluirá una sorpresa pensada por Alejandro Ros, a cargo del diseño de la placa. Los dibujos digitales del arte del álbum son del propio Spinetta.

El detalle de cada tema

“Ya no mires atrás, ya no temas a la distancia que te aparta”, canta Luis Alberto en el tema que titula a esta placa póstuma. El disco se pondrá a la venta primero en CD y en febrero estará también en vinilo, formato que incluirá una sorpresa pensada por Alejandro Ros, a cargo del diseño de la placa. Los dibujos digitales del arte del álbum son del propio Spinetta.

El vigoroso “Veinte ciudades” da inicio a una travesía a la que le siguen “Ya no mires atrás” y “Agua de río”, una bella canción donde se escucha la voz clara y emotiva de Luis Alberto que se suspende en un estribillo etéreo.

Luego llega “Nueva luna, mundo arjo”, sugestiva pieza que el músico interpretó en vivo muchas veces pero que nunca había sido editada, en la que repite la movilizante frase “esta noche mi casa no está” y que viaja naturalmente hacia el sonido de su etapa en Jade.

“Es un tema hermoso de la época de Spinetta Jade que nunca había grabado. Lo dejó ahí, una joya que papá dejó”, definió Catarina sobre la canción que remite al viaje artístico que lideró entre 1980 y 1985 y que se plasmó en los álbumes “Alma de diamante”, “Los niños que escriben en el cielo”, “Bajo Belgrano” y “Madre en años luz”.

El disco continúa con otro hallazgo, “Merecer“, un tema con bases funk y mucho groove que cuenta con las participaciones de Dante y Valentino, los hijos de Spinetta, que rapean en el momento, sin ningún agregado posterior, aclaró Catarina.

Hacia el final pueden escucharse dos canciones dedicadas a su coach vocal Grace Cosceri. Una es “Luces y sombras”, que interpretó junto a Alejandro Franov en teclados, bajo sinte y sitar, y la otra es “Diadema”, dueña de una extraña melodía en la que Luis Alberto bucea en los agudos y habla de “la diadema de amor total”, mientras detrás, en el aire, se oye el sonido de un teclado que navega caminos insospechados.

Con bases sólidas y arreglos que llevan el inconfundible sello spinetteano, el álbum suena cercano, algo que se puede atribuir a que fue grabado por la afiatada banda que secundó al artista en su última etapa y que estuvo integrada por Juan Carlos “Mono” Fontana y Claudio Cardone en teclados, Sergio Verdinelli en batería y Nerina Nicotra en bajo.

“Primero grabaron todos juntos y después Luis grabó solo la voz”, contó Aníbal “La Vieja” Barrios, que acompañó a Spinetta durante 41 años como asistente y amigo inseparable y que manifestó además lo duro que fue para él atravesar este tiempo sin su compañero, de quien el próximo 8 de febrero se cumplirán ocho años de su partida.