El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, justificó el trabajo infantil, que está penado por ley, así como también la autorización de portación de armas para menores de edad, que fue rechazada por el Congreso.

En una transmisión en vivo en Facebook, el ultraderechista de 63 años relató su experiencia personal de niño en una hacienda del interior de Sao Paulo. En tanto, contó que con nueve años conducía tractores en la hacienda, araba la tierra, pescaba y realizaba disparos en medios de la arboleda "sin problemas".

"Cuando un chico de nueve o diez años está trabajando siempre hay un montón de personas que dicen que eso es trabajo esclavo, trabajo infantil... pero cuando ven a un menor fumando una piedra de crack nadie dice nada", agregó.

Bolsonaro insistió en que el trabajo infantil "no dificulta la vida de nadie", pero aclaró que no tiene previsto presentar ningún proyecto de ley para relajar las normas porque sería "masacrado" por la opinión pública.

Cabe señalar que actualmente, las leyes brasileñas impiden trabajar a menores de 14 años.

En su transmisión en directo, el mandatario consideró también que hay un exceso de derechos que no están ayudando a la juventud brasileña y expresó su nostalgia por el tiempo en el que "había más deberes que derechos".

(EFE)