La Lepra va por su segunda semana de prácticas, y esta vez será ya en Necochea, adonde los 32 jugadores que se lleva Américo Gallego se instalarán a realizar la pretemporada. De allí surgirá el equipo titular durante 2015. Tienen tiempo hasta el 24 de enero. Pero mientras tanto, la preocupación pasa por la demora de Diego Mateo en recuperarse de su lesión. Algunos hasta ponen en duda el retorno del rubio mediocampista al fútbol profesional. Y eso para el corazón leproso, duele como una puñalada. 

Hay cuatro que van por primera vez: los pibes Stefano Callegari, Joaquín Torres, Iván Silva y Héctor Fértoli.

Lo bueno de estos preparativos es la certeza de que Hernán Bernardello ya está a las órdenes del Tolo, lo mismo que el arquero Luciano Pocrjnik. El sí estará hasta junio, pero esta mañana no viajó es Ezequiel Ponce, que voló a Italia para firmar contrato con la Roma.

En las próximas horas se conocerán los partidos amistosos que concertará la dirigencia leprosa para su equipo en la costa.

Lo preocupante es la situación de Diego Mateo. Pomelo no viajó a Necochea porque su pierna derecha no se recupera de una infección que quizás denote alguna negligencia médica. El volante, ídolo de la hinchada leprosa, no juega desde setiembre, cuando salió en el partido frente a Banfield, en el Coloso. 

Se informó que la lesión corresponde a una infección que lo terminó marginando del torneo pasado. Ahora era su turno de volver a la actividad para realizar la pretemporada, pero el propio DT informó que Mateo aún no tiene el alta médica. “Está con mucho ánimo, viene todos los días temprano a hacer su trabajo, pero él no va a viajar a la pretemporada, se va a quedar acá para que lo traten mucho mejor. Es un jugador clave, me puede jugar de dos, de cinco, de doble cinco, tiene juego aéreo, tiene mucha experiencia. Para mí es muy importante, y confío que se va a recuperar antes de lo previsto”, hizo fuerza Gallego en rueda de prensa. Pero el regreso todavía es incierto.