Un grupo de residentes y profesionales de la salud se fotografiaron al término de una intervención cesárea, con la parturienta y el bebé en el mismo quirófano, en el marco de un festejo. Las fotos se viralizaron por la red social Instagram, y se armó flor de escándalo.

Ocurrió en el Hospital Evita Pueblo, de la localidad bonaerense de Berazategui, entre Buenos Aires y La Plata. Las autoridades anunciaron este miércoles que analizan sancionar a los médicos y residentes de la institución que hicieron esas selfies y las subieron a internet.

La directora de ese centro de salud, Karina Fiquepron, aseguró en declaraciones a la prensa que si bien no hay una denuncia formal, las autoridades iniciaron actuaciones de oficio, que podrían derivar en sanciones al personal involucrado.

Las fotos, que se viralizaron por la red social Instagram, muestran al grupo de profesionales de salud y novatos tomándose selfies durante una cesárea. En otra de las tomas, se puede observar como una de las residentes es "bautizada", ya que era su primera intervención de este tipo, y le arrojan líquido fisiológico sobre su cabeza.

La directora del hospital indicó que la madre y su bebé nunca corrieron riesgo de salud, a la vez que evaluó que esto "nunca debería pasar".

"No avalamos este tipo de prácticas, aunque también hay que aclarar que nunca se puso en riesgo la salud del paciente", manifestó la directora del centro de salud.