Florencia, una localidad del norte santafesino, fue escenario de una campaña electoral insólita. El candidato a intendente Fabio Villa, que había perdido en las Paso, logró revertir el resultado este domingo con una estrategia polémica: prometió sortear electrodomésticos si ganaba. Y ganó. La maniobra no solo le dio la victoria, sino que disparó la participación electoral al 80,86%, en una jornada marcada por el ausentismo en gran parte de la provincia.

En un video que circuló por redes sociales y servicios de mensajería, Villa —actual presidente del Concejo Municipal— mostró una serie de premios que incluirían “dos motos, una bici, una heladera, una cocina, un equipo de sonido, una tele, una motoguadaña y dos celulares”. La condición para participar era simple: que él resultara electo. “Tiene que ganar Fabio. Si ganamos, estos premios pueden ser tuyos”, reforzaba una colaboradora en el mismo video.

Villa compitió con la lista de Unidos para Cambiar Santa Fe y logró superar al actual intendente Rubén "Negro" Quain, que buscaba la reelección por Más para Santa Fe. En las Paso, el libertario había quedado 80 votos por debajo. En las generales, con la ayuda del “megasorteo”, se impuso por 479 votos de diferencia, en un resultado que generó tanto sorpresa como rechazo en varios sectores políticos.

El caso ya circula como uno de los más comentados de la elección santafesina. Aunque la campaña fue efectiva en términos de resultado, dejó en evidencia la falta de regulación sobre ciertos límites éticos en la propaganda electoral. Hasta el momento, no se conocieron impugnaciones ni sanciones formales por parte del Tribunal Electoral.