Polito forma parte de las heladerías emblemáticas que configuraron la historia de nuestra ciudad. Su dueño, al igual que varios de los que iniciaron la producción artesanal de helados en Rosario, provino de Italia. Su nombre es Salvador Zagarrio.

Salvador comenzó como ayudante en la heladería de Don Pedro Comanducci, Heladería Romagnola, hoy conocida como Com Com. En esa época, pelaba frutas y llevaba helado a los kioscos en su moto. De esta manera aprendió el oficio.

Después de unos años, se asoció para formar La Turinesa, otra heladería muy recordada que forma parte de nuestra historia y que se ubicaba en las calles Godoy y Lavalle.

Fue en octubre de 1975 cuando, junto a su esposa Paulina Turco, compró Polito, en Buenos Aires y Zeballos. “Cuando él compró la heladería ya se llamaba así... y decidió dejarle el nombre. Al poco tiempo y para muchos él empezó a ser Polito”, nos cuenta su hija Paula.

“En esa época había pocas heladerías y no estaban tan bien puestas como ahora”, comentó Paulina Turco. “Se empezaba con poquitas cosas, no como hoy que ya se inaugura con todo instalado. Mis hijas fueron creciendo y colaborando con el trabajo”.

Paulina recuerda como si fuera ayer el esfuerzo que conllevaba en un principio la maquinaria disponible. “Había que levantarse a la madrugada para enfriarla. El trabajo era muy sacrificado. Tampoco había tantos empleados, era prácticamente la familia sola trabajando. Nos publicitábamos con volantes o por la radio”, relató.

“Trabajamos allí 33 años hasta que mi marido enfermó”, afirmó con tristeza. “Él era un hombre muy creativo. Nosotros teníamos el famoso helado de fideos de tallarines al tuco. Se trataba de helado en forma de tallarines con salsa de frutilla y chocolate blanco rallado. Llamaba mucho la atención y era muy pedido”.

Aún hoy los miembros de la Cámara de Heladeros aseguran que la colaboración de Polito fue fundamental para el crecimiento de la misma. Se lo recuerda como un maestro ya que no sólo fabricaba deliciosos helados sino que también brindó su apoyo y su experiencia para que muchos principiantes aprendieran a elaborar helado artesanal de excelente calidad.

En el 2008, lamentablemente, “Polito” debió cerrar sus puertas. Los famosos helados de tallarines al tuco, que era helado de vainilla con salsa de frutilla, quedarían por siempre en el recuerdo de aquellxs que lo supieron probar.

Muchas gracias a @paulazagarrio, hija del creador de “Polito”, por compartir con @rosarioporconocer la historia de la heladería y las tan valiosas fotos.