Que se aprende mucho en la universidad, no quedan dudas. Pero a veces, lo que los estudios pueden aportar sorprende a todos, profesores y alumnos. Es el caso de una chica norteamericana que en plena clase de biología descubrió algo que transformaría su vida: su tío era en realidad su padre.

Anya Hettich, de 19 años y estudiante de la Universidad Estatal de California estaba haciendo un experimento durante una clase de biología. Durante la clase universitaria, los estudiantes discutían e indagaban sobre el tipo de sangre que tenían.

Ella reveló que era de tipo sanguíneo AB, mientras que su madre era A y su padre O. A lo que una de sus compañeras respondió que era imposible ese cruce sanguíneo y su profesora lo corroboró. La maestra entonces le pidió que hablara con sus padres.

Unos días más tarde, la alumna contó a los 243 alumnos de su clase que la explicación de que su sangre no coincidía con la de sus padres era porque su madre tuvo una aventura con el hermanastro de su padre y como consecuencia nació ella, como explicó luego públicamente a través de su cuenta oficial de Twitter, que ahora está protegida.

"Así que, técnicamente, fui criada por mi tío y no por mi padre toda la vida, y mi madre nos lo ocultó a los dos durante años", explicó.