A casi tres semanas del ataque que sufrió en la puerta de un boliche rosarino por el cual sufrió una grave fractura de mandíbula, el hijo de Valeria Mazza, Tiziano Gravier, habló con la prensa y contó cómo fue aquella noche y su recuperación.

Según contó, aquel fin de semana de principios de junio toda la familia volvieron a Rosario después de tres o cuatro años para el cumpleaños de su abuela. Esa noche decidieron salir con sus primos y hermano a un boliche en la zona de Pichincha. Luego pasaron a buscar a unas amigas a un boliche cercano, en Brown y Francia, y mientras hacían tiempo afuera, se le acercaron dos personas quienes de costado le dijeron "che tincho" (término usado de manera similar a cheto) y lo golpearon. 

"En el momento en que dijimos 'vamos', escucho que alguien me dice 'Ey tincho', y cuando lo miro, me como un golpe. El primero que me golpea ni siquiera lo veo, no lo puedo describir. Y tengo una imagen de costado que estos pibes se le van a mi hermano, y como instinto fui a sacar a mi hermano", contó.

Con la mandíbula rota llamaron a su madre y lo llevaron al hospital. "Estoy volviendo de la rutina de a poco, pensando en recuperarme y entrenar", dijo el joven que practica esquí. Además dijo que acepta el perdón, pero que necesita que haya justicia. Vale recordar que la Justicia estableció la prisión preventiva por 90 días para los dos agresores en un resolución del juez Hernán Postma que causó polémica. 

TIZIANO GRAVIER: Habló en Telenoche tras la brutal golpiza