Los lobos tienen un comportamiento más social que los perros que forman jaurías, lo que defiende que las ayudas a las manadas de los canes son tendencias ancestrales y no fruto de la domesticación, según un estudio publicado en la revista especializada Plos One.

Varios investigadores del Centro de Ciencia del Lobo en Viena realizaron un experimento con las dos especies de animales que se basaba en una tarea en una pantalla táctil que les permitía proporcionar alimentos a otros miembros de su manada.

Rachel Dale y sus colegas demostraron que los lobos tuvieron una conducta más pro social que los perros de carga. "Las conductas pro sociales son acciones destinadas a beneficiar a otros y son importantes para la cooperación", explicó Dale.

Algunos científicos habían planteado la hipótesis de que la domesticación de los perros ha seleccionado tendencias cooperativas, lo que en principio sugiere que los perros deben ser más pro sociales que sus parientes vivos más cercanos: los lobos.

Sin embargo, otros planteamientos sostienen que las conductas pro sociales observadas en perros mascotas surgieron de rasgos ancestrales. Para explorar estas ideas, Dale y sus colegas compararon tendencias pro sociales entre nueve lobos y seis perros criados y viviendo en manadas en el Centro de Ciencia del Lobo.

Los investigadores entrenaron a cada animal para que usaran su nariz para presionar un símbolo de "dar" en una pantalla táctil, con el fin de entregar alimentos a un recinto adyacente, donde otro animal de la misma especie podía o no estar presente.

Después de varias pruebas, los lobos optaron por entregar "significativamente más comida" al lugar adyacente cuando tenía un miembro de su propia manada. "Estos hallazgos sugieren que los lobos son más pro sociales que los perros criados en condiciones de manada similares, lo que apoya las hipótesis de que los comportamientos pro sociales observados en perros mascotas pueden atribuirse a rasgos ancestrales", describieron los autores en sus conclusiones.

Asimismo, Dale señaló que el estudio demuestra que la domesticación "no necesariamente hace que los perros sean más pro sociales". "Más bien, parece que la tolerancia y la generosidad hacia los miembros del grupo ayudan a producir altos niveles de cooperación, como se ve en los lobos", puntualizó.

(EFE)