Cuando uno lleva una película de estreno a un festival tan conocido como Sundance, espera que se hable de la cinta por su contenido, por su narrativa, por su fotografía. En este caso, lo que llama la atención de la nueva película de Daniel Radcliffe no tiene nada que ver con eso.

Es que Swiss Army Man, el largometraje protagonizado por el actor de Harry Potter, es tan, tan rara que ni el público del festival de cine independiente más relevante de Estados Unidos ha podido soportarla y huyó de la sala en su proyección.

Resulta que esta trabajo, también protagonizado por el nominado al Globo de Oro Paul Dano y escrita y dirigida por Dan Kwan y Daniel Scheinert, autores del cortometraje Interesting Ball, relata la historia de un joven con tendencias suicidas que se encuentra el cadáver de otro joven en una playa abandonada.

Pero la parte rara viene a continuación: el cadáver resulta ser un zombie que padece continuas flatulencias, es decir, es un muerto viviente pedorro. Y la cosa no termina ahí, porque el tipo también sufre de otra complicación: tiene una erección permanente.

Todos estos ingredientes hicieron que la gente que acudió a ver el filme saliera de la sala al descubrir tal historia. Sin embargo, Radcliffe sigue defendiendo su trabajo. “No dudé ni tan solo un segundo en unirme a este proyecto, me ofreció la oportunidad de hacer algo interesante, interpretar a una persona muerta en un contexto distinto y divertido a partes iguales”, defendió en la rueda de prensa del festival.