El resultado del control antidoping de un jugador estadounidense de básquet sorprendió al mundo entero. Según las conclusiones del estudio, DJ Cooper, que en el momento del test jugaba en el Mónaco de la liga francesa, estaba embarazo.

Sin embargo, la insólita situación se resolvió rápidamente, ya que el deportista de 28 años reconoció que la orina presentada para realizar el control no era de él, sino la de su pareja.

El análisis reveló que la muestra contenía GHC, una hormona que produce la placenta. Al conocerse el engaño, Cooper fue suspendido por dos años, aunque el basquetbolista indicó que se alejaba de las canchas por motivos personales.

La buena noticia, dentro de la extraña situación, fue la confirmación del embarazo de la mujer del deportista.

Cooper no tuvo éxito en su país y quedó afuera del Draft 2013 que le cerró las puertas de entrada a la NBA. Sin embargo, su carrera en el básquet europeo no es para nada despreciable con pasos trascendentes por PAOK, Panathinaikos, AEK Atenas y Mónaco, entre otros equipos. 

En Francia llegó a ser el mejor jugador de la Liga cuando defendía la camiseta del Pau Orthez. Ahora su carrera queda en suspenso hasta 2020. Al menos tendrá tiempo libre para disfrutar su paternidad.