En su primera exposición individual en seis años, el artista Julián Prebisch presenta en Smart Gallery BA "202021", un proyecto que realizó a lo largo de los dos últimos años, concebido como una continuidad: una sucesión de horas, días y meses dedicados a estas obras de gran formato con paisajes orgánicos y una paleta restringida en azules y colores de la tierra.

La muestra que permanecerá hasta el 15 de noviembre en el espacio de Avenida Alvear 1.580, reúne un conjunto de pinturas que remiten a un cosmos, a través de diversas formas que construyen paisajes deshabitados, mientras que en algunas de ellas combina la pintura con la escultura.

"Me interesa trazar una mirada contemporánea sobre la historia material y crear un ejercicio poético que genere cierta melancolía. Continuar lo que algún día fue y que nadie sabe por qué dejó de ser. Ese hueco negro, donde desaparecen cosas, tendencias o momentos de la historia, es donde radica mi inspiración", expresó el artista, hijo del artista, diseñador y arquitecto Luis Fernando Benedit, aunque no firma sus obras con el mismo apellido de su padre.

Para Prebisch, sus obras "son, de alguna manera, una interrogación sobre el origen de las formas y su función", señaló el artista nacido en Buenos Aires en 1977, quien ha exhibido en Estados Unidos, México y España.

"En los cuadros de Julián Prebisch están estas imágenes de un cosmos en plena invención. Este conjunto de cuadros es un intento de hacer comprensible el mito de la creación por medio de la pintura", escribió Laura Isola en el texto que acompaña la muestra.

Obras como "El palacio de la luna", "La puerta", "La otra fuente", "El hueso" o "El último mar" integran la exposición, una compilación de estilos de las vanguardias del siglo XX, con una manera libre de usar los elementos formales en paisajes inquietantes.