Una vuelta de tuerca inesperada: donde la gente se congregaba a ver artistas y tomar porrón ahora será un espacio de exhibiciones sobre el Che Guevara: el histórico bar del under rosarino Berlín que anunciaba su cierre ahora se convertirá en museo. Fue anunciado este viernes en una conferencia en la plaza del Che frente a la cortada del bar, por dirigentes de Ciudad Futura, La Garganta Poderosa y el fundador del bar Lulo Corradín.

Este fue el modo que encontraron para llevar a cabo un proyecto que promete preservar el patrimonio cultural de la ciudad que es el Berlín, y a su vez saldar lo que ellos consideraron una importante deuda con la historia de Rosario" al no contar con un museo del revolucionario rosarino más afamado.

La concejala Caren Tepp confirmó además a Rosarioplus.com que "continuará funcionando el bar con espacio para los shows". Consultada sobre los detalles de la propuesta, precisó: "Ahora hay que empezar a trabajar con los planos y los espacios. La idea es que además cuente con actividades durante el día con talleres y charlas, y por otro lado además de pensarlo puertas adentro, integrarlo al centro con actividades vinculadas a la plaza del Che. Revitalizarlo con vida, no con cemento, por ejemplo con ferias los fines de semana".

El concejal Juan Monteverde fue el encargado de hacer el anuncio este viernes en la plaza: “Nos enteramos de una noticia que el Berlín cerraba, era inexorable y parecía que no hay vuelta atrás. Hoy estamos acá para decir que no es así y continúa. 'Berlín la poderosa ciudad futura' parece una alineación cósmica del destino”.

Fue a continuación que explicó el proyecto que aún permanece verde: “En el lugar donde funcionaba Berlín los movimientos sociales y culturales hemos decidido saldar una deuda que tiene esta ciudad con su historia y construir el primer Museo del Che de la ciudad. Esto aun no tiene forma, queremos que sea una construcción colectiva”.

Y explicó sobre la causa de esta decisión, que “miles de ciudadanos vienen del mundo a conocer la ciudad donde nació y no tienen un lugar donde visitar. Uno de los rosarinos más conocidos del mundo no tiene el museo que merece. Pasaron muchos años y ninguna gestión del Estado lo hizo, lo vamos a fundar con la gestión social”.

El Museo del Che tendrá, según Monteverde, un triple impacto: “Saldaremos la deuda con la historia del Che, salvamos un lugar  histórico de la cultura, y es un proyecto de escala ciudad: queremos que el museo se vincule con la Plaza del Che y con la casa natal, que revitalice al centro y que los barrios puedan llegar al centro. No es un lugar estático de añorar solamente sino de construir el futuro. Es el inicio de un sueño, no sabemos cómo termina”.

Consultado por la prensa sobre cómo se hará la inversión económica, Monteverde adelantó: “Habrá un consorcio de cooperación, donde participarán cooperativas sociales, y habrá varios núcleos económicos, el gastronómico, el museológico y el cultural para que sea sustentable.  Un proyecto autogestivo sustentable que genere trabajo".

Lulo Corradín se mostró “contento y conmovido por revalidar el espacio que se cerraba”, y aseguró que “esto es parte de un gran proyecto, es un hecho político importantísimo de cara al futuro. Es una gran gratificación que siento porque algo ya desistido de continuar hoy lo estoy celebrando y arremangándome para lo que vendrá”. De esta forma, lejos de su idea primigenia de correrse a un costado, será de la partida del nuevo museo.

Claudia Albornoz de La Poderosa aseguró también esperanzada: “La gente puede tener un espacio para soñar, y hacer un montón de pequeñas revoluciones. Lulo resistió con su bar”, y recordó que "el che es aquel revolucionario que nos hizo soñar con la revolución, quién no tiene una figurita del Che que nos recuerda que es posible, revoluciones que modifiquen la vida de las personas”.

Una ordenanza de la cultura nocturna pendiente

La concejala Caren Tepp precisó en la conferencia que un gran pendiente en el Concejo de Rosario es avanzar con la ordenanza de clubes sociales y culturales “para que los espacios autogestivos tengan acompañamiento en el Estado que no busque solo el control sino también el fomento de la cultura”.

Este medio le consultó sobre el estado de este proyecto y aseguró que “está con estado parlamentario, hay que lograr los acuerdos. Esperamos esta movida ayude a construir los consensos”.

El edificio del Berlín, destacó Tepp es un patrimonio histórico que buscan de esta forma preservar. A eso sumó: "Acompañamos un proyecto de ordenanza que busca peatonalizar el pasaje Simeoni. No pudimos defender el de la ochava para hacer un negocio inmobiliario. Se llevaron puesta la esquina pero la cortada la vamos a defender".

Recordó en la conferencia que “el gran poeta Fabricio Simeoni, que lleva su nombre la cortada, se merece que la cultura y el patrimonio histórico tengan valor y que la especulación inmobiliaria no lo pudo comprar en el centro de la ciudad. El Berlín nació como una rebeldía en los ’90, en una etapa desesperanzadora del país, y eso un poco se asemeja a lo que estamos viviendo hoy”.