Fue mucha la espera de los hinchas para festejar los 125 años de vida de Rosario Central. Primero fue la postergación que era para el sábado, ya que un cielo tormentoso hizo desistir a los organizadores por miedo a la lluvia.

En el domingo, la fiesta estaba anunciada para las 19.30 pero desde temprano los hinchas vestidos de auriazul, paseaban por las adyacencias del Gigante de Arroyito esperando su fiesta.

Dentro de la cancha fue todo festejo, nadie se acordó de un año futbolístico ambivalente y triste al perder la final de la Copa Argentina. La música animó toda la tarde: primero se cantó el himno de Central con ritmo de rock de La Descontrolada. Antes, la murga Los Delirantes de Arroyito y el Cirkito Canalla y sus malabares y ocurrencias payasescas, hicieron entretener al público.

Luego fue el turno de las leyendas del fútbol. La mayor explosión fue cuando Aldo Pedro Poy, desde el escenario, lució la misma camiseta de piqué, con el número 9 en la espalda, del día de la ya mítica palomita.

Más tarde apareció el Puma Rodríguez, quien levantó las manos y coreó junto a la hinhcada algunas canciones.

El faltazo lo pegó Fito Páez, ya que la postergación le cayó mal debido a un show programado en Buenos Aires para el domingo. Sin embargo, estuvieron otros artistas reconocidos hinchas del canalla, como el Pájaro Gómez con Vilma Palma, Fluido y Cielo Razzo, y Los Vándalos, con su inconfundible líder Popono.